Page 183 - LIBRO BLANCO 2018

liBRo BlanCo de la salud Visual en esPaÑa
2019
una córnea irregular y una mala calidad visual del paciente que puede detectarse a tiempo gracias al uso del topógrafo”, confirma César Villa.
• Problemas oculares derivados de una ciru- gía o uso de lentes de contacto: “Los defectos oculares también pueden aparecer como efecto de la complicación de una cirugía refractiva, ya que puede provocar la irregularidad de la cór- nea y, por tanto, alteraciones de la calidad visual. Además, una lente de contacto, sobre todo de tipo rígido, que no esté bien adaptada puede provocar también una irregularidad corneal. Sin embargo, la diferencia con esta última es que se trata de una irregularidad corneal reversible que puede ser corregida cuando se deja de utilizar la lente, ya que la córnea recupera su forma nor- mal”, puntualiza el catedrático.
La topografía corneal es un proceso muy rápido e indoloro para el paciente, ya que apenas dura unos segundos y no implica ninguna invasión para el ojo. “El método de trabajo es muy sencillo e incluso en algunas ópticas este procedimiento lo puede realizar el personal auxiliar, aunque lue-
go es el profesional óptico-optometrista el en- cargado de interpretar las imágenes obtenidas para determinar si está ante una córnea normal o irregular”, explica César Villa.
la CóRnea en TRes dimensiones
El resultado de estas pruebas topográficas es una especie de “mapa en tres dimensiones” de la córnea que exige una interpretación, ya que se trata de una representación de la superficie corneal que marca su espesor, curvatura, eleva- ción, potencia y relieve. “Las topografías dan dis- tintos tipos de mapas y en función de lo que se quiera determinar se utiliza un mapa u otro. La información aparece en un código cromático; es decir, en unos mapas de color que se interpretan según las necesidades del profesional”, detalla César Villa. Así pues, la topografía corneal se em- plea para obtener toda la información de la cór- nea de forma inmediata en los siguientes casos: • Para evaluar si un paciente es candidato o no la
cirugía refractiva láser y, en su caso, indicar el tipo de técnica más adecuado.
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