Page 189 - LIBRO BLANCO 2018

liBRo BlanCo de la salud Visual en esPaÑa
2019
opinión del experto
svi, un probLema de saLud generaL
enriQue orellAnA
Óptico-Optometrista.
Business Processes Manager de Grupo Zeiss.
Para trabajar en el ámbito del Síndrome Vi- sual Informática (SVI), el concepto de “es- pecialización” es justo lo contrario de cómo debemos abordar este problema. De he- cho, más bien resulta necesario pensar en él desde un concepto mucho más amplio; es decir, el SIV no se trata de un problema relacionado con los ojos o la salud ocular, o con los huesos o con los músculos. Pense- mos que se trata de un problema muy ha- bitual en los usuarios de ordenadores que puede afectar de forma más o menos sig- nificativa a todo nuestro esquema corporal en su conjunto.
Desgraciadamente, los afectados por este síndrome suelen afrontar este problema parcialmente. De nada sirve tomar un fár- maco para evitar uno de los síntomas si no analizamos y corregimos la causa, o las cau- sas, que lo provoca. Igualmente, de poco sir- ve ponerse unas gafas o lentes de contacto ocupacionales si antes no somos plenamen- te conscientes de cómo interactuamos con nuestros elementos de trabajo.
PAPEL DEL ÓPTICO-OPTOMETRISTA
Por todo ello, y como consecuencia del au- mento porcentual de este síndrome entre la sociedad, el papel del óptico-optometris- ta en la detección y control del SVI es clave en su detección y tratamiento.
Destacar que cualquier especialista de la sa- lud puede detectar precozmente este pro- blema, pero entre ellos, y muy especialmen- te, el óptico-optometrista, debido a que la probabilidad de que los primeros síntomas del SIV sean visuales es muy alta.
torno y con los elementos de trabajo afecta a nuestro confort. Si, además, lo hacemos sin considerar unas medidas higiénicas mínimas, como pueden ser la postura, el descanso, la distancia, etcétera, pueden acabar afectando a nuestra salud”, confirma Enrique Orellana, Business Processes Manager de Grupo Zeiss y miembro del Colegio Nacional de Ópticos-Op- tometristas.
En este contexto, los expertos coinciden en afir- mar que el SVI es un problema acuciante que tiende a aumentar. Sin embargo, la ausencia de consenso en la descripción exacta del SVI, así como en su diagnóstico, hace difícil estimar cuántas personas pueden padecer este proble- ma. “En muchas de las publicaciones no científi- cas encontramos datos estimados de en torno al 90% de prevalencia en personas que usan de forma habitual las pantallas de visualización de datos, mientras que si revisamos las publicacio- nes científicas encontramos cuestionarios vali- dados que permiten conocer y comparar las pre- valencias del SVI en la población española. Estos
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